Quienes se enfrentan a la desvinculación de la empresa pueden vivir este momento como uno de los más estresantes en su vida, por ello los programas enfocados en brindarles apoyo para la transición, pueden representar un regalo sin precedentes.
Enfrentar un proceso de salida de una organización, cuando no ha sido una decisión personal y no se había tenido alguna señal que alertara para tomar la previsión necesaria ante una situación así, puede llevar a experimentar a quienes lo viven, momentos de gran incertidumbre, de ansiedad y dudas, poniendo en tela de juicio sus capacidades, mermando su autoestima y experimentando un gran temor de lo que le depara el porvenir.
Muchas personas se apresuran a iniciar la búsqueda y optan por mantener la misma trayectoria ocupacional, como parte de la inercia que han vivido, sin cuestionarse siquiera si existen en el mercado otras oportunidades que pudieran brindarles mayor satisfacción personal y mejores resultados, como consecuencia de un mejor aprovechamiento de sus competencias conjugadas con los intereses y los valores que les motivan, en suma, de auto conocerse.
La experiencia a través de gran cantidad de procesos nos ha permitido aprender que la actitud de la persona determina totalmente el éxito que pueda tener para salir adelante, ‘victorioso’ de este trance, con más aprendizajes y mejores perspectivas, tanto en lo profesional, como en lo personal. Es por ello por lo que un buen programa de Transición de Carrera debe colaborar para que el participante pueda vislumbrar esta etapa como una oportunidad que se genera a partir de la crisis que representa la pérdida del empleo, y que el tener que abandonar su zona de confort puede reportarle opciones interesantes y atractivas que antes no hubiera considerado.
Con frecuencia nos encontramos con personas que habían perdido la pasión por su trabajo, pero el temor a explorar nuevas opciones y abandonar la seguridad, los mantenía ‘atados’ a empresas y posiciones que poco les estimulaban, y que de no ser por el ‘empujón’ recibido, podrían mantenerse en el mismo esquema, dejando que su vida laboral perdiera ‘brillo’, eligiendo el camino fácil, de satisfacer la necesidad básica, sin que constituyera una fuente de satisfacción, de trascendencia y plenitud. El trabajo del consultor de Outplacement, en estos casos, implica ayudar al participante a ‘abrir los ojos’, a ver ‘el regalo’ que la vida le presenta y a tomar conciencia de su oportunidad de elegir y construir para sí, una experiencia laboral gratificante, retadora y en línea con sus valores y objetivos, transmutando así los sentimientos de minusvalía, de enojo, culpa o depresión, en esperanza, ilusión, creatividad y, sobre todo, de retomar la sensación de controlar su vida nuevamente.
Cuando esto se consigue, el participante puede recobrar la confianza en sí mismo, estar dispuesto a auto conocerse para estar más consciente, tanto de sus fortalezas como de sus áreas de mejora, así como a invertir toda su energía en establecer su nuevo proyecto de vida y a hacerlo realidad. Recordemos la frase del gran pensador francés Jean Paul Sartre “Quien tiene un para qué, encuentra cualquier como”.
En DOit Beyond Limits tenemos muy presente el impacto que nuestros programas pueden lograr tanto en las empresas como en cada uno de nuestros participantes. Trabajamos con pasión acompañando a quienes se desvinculan, en el desarrollo de sus proyectos de vida y carrera. Visítanos en nuestra página: http://hlgdoit.com/